lunes, 3 de noviembre de 2008

Elección 2008

Mañana martes 4 de Noviembre será la elección presidencial de los Estados Unidos entre el demócrata Barack Obama y el Republicano John McCain.

Para aquellos no familiarizados con el proceso de elección presidencial de ese país, el ganador no es quien obtenga más votos, sino quien tenga más votos electorales. Estos votos son puntos asignados a cada estado del país y cada candidato necesita obtener el mayor número de votos en un estado para obtener los votos electorales de dicho estado, sin importar la diferencia de votos reales, el ganador del estado gana el total de los votos asignados a éste. Por ejemplo, si Obama gana Florida, él obtiene los 27 votos electorales asignados al estado, sin importar si lo gano por 1 o un millón de votos reales. El número de votos electorales de los estados equivale al número de Representates y Senadores en el Congreso.

Hay varias herramientas en Internet para saber los votos electorales asignados a cada estado, normalmente acompañado por las encuestas más recientes, así como sus tendencias históricas. Con estos mapas ustedes pueden llevar las cuentas quién va ganando y por qué.

Si pudiera votar, yo elegiría a Obama con los ojos cerrados, no porque me convenza o tengo mucha confianza en él, de hecho tengo muchas cosas contra él, pero es que McCain es una opción tan, pero tan mala, que realmente no es difícil decidirse. Sobre todo después de la selección para vicepresidente de McCain: Sarah Palin. Esta selección fue un desesperado intento por ganarse a los votantes que querían que Hillary Clinton le ganara a Obama en las elecciones internas de los demócratas. Aparte de eso, también fue un intento de tomar una persona con quien la multitud se pudiera identificar. Y es que a todos nos gusta apoyar a la gente en relativa desventaja. Nos gusta apoyar a los "pequeños". Por desgracia muchos cometen el error, muy grave, de seguir este gusto en cosas importantes, donde no se deben tomar decisiones con el corazón.

En cuanto a predicciones, todo parece indicar que Obama ganará pues tiene asegurados la mayoría de los estados demócratas, los cuales casi le asegurarían la victoria, pero además, parece llevar buena ventaja en muchos de los estados indecisos e incluso en algunos normalmente republicanos. Salvo algún cambio radical en las últimas horas, tendremos al primer Presidente de apariencia afroamericana en la historia de los Estados Unidos. Algo que hasta ahora solo salía en películas con relatos en algún futuro no muy lejano. Mañana, eso sería una realidad.

Ahora, ni Obama ni McCain son una solución inmediata para los problemas del país (y del mundo), pero esperemos que el ganador sea lo suficientemente apto para devolverle a los Estados Unidos un poco de lo perdido durante los 8 años de pesadilla de George W. Bush donde se perdió el liderazgo en muchos de los campos e industrias. Donde se hicieron muchos enemigos nuevos y recobraron otros más. Donde se tomó un superávit dejado por la administración previa y lo convirtieron en el (creo) peor déficit en la historia, incluso sin contar la presente recesión. Donde la educación cayó y la ciencia sufrió.

Que gane el mejor.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por mucho Obama, no porque confíe en él, ni porque este de acuerdo con sus políticas. Lo seleciono porque, como dices, McCain cometió el mayor error en su vida al seleccionar a Sarah Palin (la americana promedio) como vicepresidente. Pobres estadounidenses si gana McCain y Palin, mejor dicho pobrecitos de nosotros y del mundo si ganan ellos. Quizás mucha gente no entienda porque es un error seleccionar a Palin como vicepresidenta, pero la respuesta a éste porque es muy simple: ignorancia, fanatismo, pobre preparación, pobre conocimiento en general y principalmente comentarios tontos al público sobre asuntos importantes identifican muy bien a Sarah Palin.